Yudi Pulido, criminóloga que dejó todo por el Sueño Americano

Oaxaca / 05.11.2022 21:20:00

Casada, con las marcas que el sol le ha dejado en el rostro, Yudi Pulido. originaria de Venezuela, ha recorrido 420 kilómetros desde Ciudad Hidalgo hasta Juchitán en el istmo de Tehuantepec, criminóloga de profesión, lleva una semana en espera de conseguir un trabajo que le permita llegar a los Estados Unidos, buscando ejercer su profesión.

Con más de 15 años de experiencia en trabajos de criminología, Yudi narra por qué decidió dejar su empleo y separarse de sus dos hijos.

“El 14 de septiembre decidí emprender esta aventura, según mis planes iba a durar un mes, yo ya debería estar por lo menos en la frontera norte de México, que haces en un país donde ganas 20 dólares al mes y que por más que te friegues haciendo 20 cosas al día no te alcanza, el frijol (cuesta) 10 dólares el kilo, el pollo 20 dólares, así no se puede”, dijo, al recordar su país.

Con dolor y un poco de melancolía, Yudi explica como desde que ingresó a territorio mexicano, ha vivido una batalla con los elementos del Instituto Nacional de Migración.

“A mí me detuvieron y me trasladaron a Tapachula a la estación migratoria “Siglo XXI”, una cárcel que no se la deseo a nadie más, de ahí logré llegar a San Pedro, nos dijeron que ahí nos iban a dar nuestro permiso migratorio, para poder avanzar en bus hasta la frontera con Estados Unidos”, comentó

Para poder ser liberada, Yudi tuvo que pagar un abogado, fueron 150 dólares los que tuvo que conseguir con su familia y fue con la ayuda de una amiga venezolana que logró salir recibir el dinero y hacer el pago.

En su camino de Chiapas a Oaxaca, fue sorteando el paso entre familias que le daban oportunidad de quedarse en los patios de sus casas y pagó junto con varias personas un pequeño cuarto con baño donde pasaban la noche.

“Yo sólo quiero trabajar, tengo mucha experiencia en el manejo de personal, tengo estudios en el manejo de armas, de cámaras de seguridad, yo sólo quiero trabajar, me encantaría que alguien viera mis cualidades, que alguien me contratara, no por un documento, si no por mi capacidad, yo lo veo muy difícil, pero no imposible”, comentó.

En espera de poder continuar su camino

Su perseverancia por lograr llegar a la frontera norte e intentar cruzar hacía los Estados Unidos, Yudi ha conseguido un lugar donde pasar la noche y dos alimentos al día, en tanto sale todas las mañanas en búsqueda de un trabajo, sin que hasta el momento encuentre una oportunidad.

“Yo estoy convencida que cualquier día de estos será mi día de suerte y alguien me va a ver y me va a decir, ven acá tienes trabajo, para yo juntar plata y poder seguir mi camino, mientras estoy muy agradecida con la familia que me abrió las puertas de su casa”.

Así como Yudi, decenas de profesionistas han tenido que migrar en búsqueda de una mejor calidad de vida, de acuerdo a los administradores del albergue migrantes en el camino de Ixtepec, en el último mes se tiene un reporte de 55 migrantes con algún tipo de profesión.

HCM