El trabajo es en ocasiones fuente de estrés, y esto afecta tanto al empleado como a los resultados de la empresa. Ahondamos en la problemática del burnout.
Tal vez lo hayas experimentado, o quizás algún compañero/a de trabajo te ha comentado que se siente así. Frustración, irritabilidad, desgana, falta de concentración…El burnout o síndrome del trabajador quemado es más común de lo que pensamos. Puede haber muchas razones para que aparezca, algunas derivadas de la propia persona, otras del entorno.
La realidad es que se trata de una situación que perjudica a todas las partes. La empresa se resiente de la falta de productividad de sus trabajadores, y éstos reducen considerablemente su calidad de vida al pasar buena parte de su jornada en un estado emocional alterado. Hoy vamos a adentrarnos en esta problemática, sus causas y posibles soluciones.
El burnout, un problema para trabajadores y empresas
Cuando un trabajador empieza a experimentar estos síntomas, rara vez desaparecen al poco tiempo. Por lo general la situación tiende a empeorar, y no es extraño que pueda evolucionar a trastornos psicológicos, ansiedad o depresión si la empresa no logra detectar lo que ocurre y trata de ponerle remedio. Es importante que los departamentos de RRHH estén alerta ante los posibles problemas de los trabajadores, incluso aquellos de índole personal, ya que éstos también pueden tener incidencia en el modo en el que se afronta el trabajo.
Por otro lado, la empresa debe hacer un esfuerzo para crear un entorno amigable, sobre todo porque, según revelan las estadísticas, la presión o la sobrecarga de trabajo son los factores que más peso tienen en que los trabajadores padezcan burnout. Otros aspectos que también influyen en la aparición del síndrome del trabajador quemado son la falta de cooperación o de comunicación a nivel interno. De ahí que aunque en gran parte el burnout venga como consecuencia del modo en el que el trabajador percibe su situación, sea necesario cuidar también que estos aspectos reciban la atención necesaria.
NEWS
LETTER
email
Actualidad, tendencias, ocio…¡Y mucho más te espera! ¿Te unes?
¿Cómo puede evitarse?
Una forma de que muchas de estas consecuencias no aparezcan es implementar fórmulas no convencionales que permitan reducir el estrés de los trabajadores. En lugar de la jornada presencial de 8 horas pueden ponerse en marcha jornadas más flexibles, en las que se pueda ajustar el tiempo en la oficina a la realización de tareas asignadas o plantear un híbrido entre teletrabajo y asistencia presencial.
Los protocolos de actuación frente al acoso laboral también son una herramienta útil, dado que en ocasiones los problemas psicológicos de los trabajadores vienen más por las interacciones sociales que por las tareas que deben llevar a cabo. Pero aunque buena parte de las empresas son conscientes de ésto, la implantación de estos protocolos no está todavía suficientemente extendida.
NOTICIAS DE ULTIMO MOMENTO:
Cómo mejorar tu descanso y tu bienestar con pequeños cambios en tu dormitorio este Black Friday
Horóscopo para el jueves 21 de noviembre de 2024: esto es lo que los astros tienen preparado para ti
30 frases poderosas contra la violencia de género cargadas de mensajes inspiradores y llenos de significado