Las bromas pesadas y las agresiones físicas o verbales durante la cena pueden llevarte a un despido
Es ya tradición celebrar una cena de Navidad con los compañeros de trabajo. Prácticamente todas las empresas tienen ya reservado el restaurante para llevar a cabo el festín. Éstos comenzarán sobre todo después del puente de diciembre. Para la hostelería es un buen momento que esperan con ansiedad para mejorar las cifras del año y atraer nuevos clientes para el futuro.
Abusar del alcohol puede traer problemas
Estas cenas se llevan a cabo sobre todo para que los empleados puedan estrechar lazos en un entorno no laboral. Aunque la idea es pasar un buen momento compartiendo mesa con el resto de la plantilla, la oportunidad no siempre termina bien.
Los abogados de Legálitas publicaron el año pasado un análisis de todo lo que puede salir mal en este tipo de reuniones. Alguno de los escenarios puede incluso llegar a un despido disciplinario de los trabajadores en función del comportamiento durante dicha cena.
El ambiente distendido y un abuso del alcohol puede llevar a situaciones de conflicto. Para evitar malentendidos hay que tratar de evitar comentarios desafortunados sobre los compañeros y las bromas de mal gusto. También hay que tener cuidado con un uso indebido en redes sociales, porque aunque estemos fuera del entorno laboral puede tener terribles consecuencias para nuestro puesto de trabajo.
Los principales motivos de despido
Según el grupo Legálitas hay ciertos casos en los que se puede dar un despido disciplinario. Hay que controlar la ingesta de alcohol, ya que puede provocar un cambio en la actitud de los trabajadores. Si se realizan comentarios hirientes sobre compañeros o superiores puede crear conflicto. Si además estos comentarios o insultos son reiterados sí pueden ser considerados como la causa para un despido legal.
Otra posible consecuencia de estas cenas acompañadas de champán puede que surga una relación amorosa entre trabajadores. Muchas empresas tienen políticas internas que no lo permiten y pueden derivar en el traslado de una de los empleados a otro centro.
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Cuando la embriaguez repercute negativamente en tu rendimiento laboral también pueden sancionarte. Si la resaca del día después provoca que te ausentes de tu puesto podrás enfrentarte a sanciones con amonestación, suspensión de empleo o despido.
Otro punto importante a tener en cuenta son las grabaciones y fotografías que se hagan durante la celebración. Al tratarse de un evento corporativo se recomienda ser prudente al difundir este material en redes sociales. Hay que contar con la aprobación de todos los que aparezcan en ella.
Difundir un vídeo en el que se estén cometiendo agresiones o insultos sí puede llevar a un despido disciplinario, no por el hecho de grabar, pero por las acciones que salen en él, ya que es un hecho muy grave según el Estatuto de los Trabajadores.
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